La Cimicifuga racemosa (CR) es un tratamiento eficaz en el alivio de los síntomas vasomotores, al menos en una población adecuada de mujeres peri y posmenopáusicas, si bien se precisan mejores ensayos clínicos con suficiente número de pacientes incluidas y mayor duración de estudio.
Son las conclusiones a las que ha llegado un equipo español, publicadas como documento de consenso en Progresos de Obstetricia y Ginecología, que representa el posicionamiento de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia sobre el uso clínico del extracto.
Según Dolores Juliá, jefe de Sección de Ginecología y Reproducción del Hospital Universitario La Fe, de Valencia, el extracto de la CR ocupa un lugar importante en el tratamiento de los síntomas vasomotores, los sofocos, que se producen con gran frecuencia en las mujeres durante esta etapa de su vida.
Perfil más beneficiado
"Es especialmente útil en aquellas mujeres con sofocos más intensos, aunque también muestra un efecto beneficioso sobre el estado de ánimo de las mujeres menopáusicas sintomáticas". El perfil que más se beneficiaría sería el de una mujer menopáusica, que presenta síntomas como sofocos y/o sudoración, y en las que además tienen una afectación de su estado de ánimo.
En estos momentos no se dispone de suficientes datos sobre su administración conjunta con otras terapias para síntomas del climaterio. "Aunque empiezan a aparecer algunos estudios de asociación de CR con isoflavonas, isoflavonas y lignanos e Hypericum perfotatum o Hierba de San Juán, en principio no tenemos bases científicas para prescribirlos". La dosis más estudiada ha sido la de 40 mg/día y, a juicio de Juliá, no deben utilizarse otras más elevadas, "pues no han demostrado mayor efectividad, y cabe pensar en que podrían potenciar la aparición de efectos secundarios".
Estudio de asociaciones
La ginecóloga también considera que los nuevos ensayos clínicos que se están llevando a cabo empiezan a obsevar evidencias de asociaciones de CR y otros fitofármacos que podrían ampliar su perfil farmacológico. Por sus mecanismos de acción hay abiertas líneas de investigación en cáncer, "cuyos datos a nivel experimental son muy interesantes. Por tanto, se necesitan ensayos clínicos que lo investiguen, incluyendo aspectos relativos a la evolución de la enfermedad y a los que atañen a las posibles interacciones con las medidas terapéuticas de uso habitual".